Por #DeFrente

El día de ayer, el senado de los EEUU aprobó unánimemente la conocida «Nica Act», cuyo fin es imponer sanciones financieras contra el gobierno del presidente Daniel Ortega. Mediante esta ley, Nicaragua estará impedida de pedir cualquier tipo de préstamo a instituciones financieras y bancarias cuya propiedad sea de origen norteamericano o que tengan capitales norteamericanos.

Sumada a las sanciones contra la vicepresidenta Rosario Murillo y a otros altos funcionarios del país centroamericano, la ley impedirá al gobierno de conseguir fuentes de financiamiento que permitan sustentar los gastos más esenciales de la nación. Todo esto, en medio de una muy leve recuperación economica tras la severa crisis social que se inicio en abril del 2018, la cual ha dejado daños materiales de cuantiosa magnitud.

El gobierno de Nicaragua, junto a varios otros gobiernos latinoamericanos, han condenado abiertamente las sanciones de los EEUU, acusándolas de injerencistas y que atentarían contra la soberanía de los pueblos.

Imagen extraída de cubadebate.cu