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Entrevista Lautaro Guanca

Lautaro Guanca: “Las elecciones se ganan con votos, pero las revoluciones se sostienen con lucha”

Entrevista a Lautaro Guanca
Por Claudia Cofré

En la Municipalidad de Peñalolén, comuna popular al oriente de la ciudad de Santiago, conversamos con Lautaro, concejal del Partido Igualdad y vocero del Frente Amplio, quien por esos días terminaba una intensa gira por varias comunas y ciudades de Chile. Quisimos comprobar con él que es posible otra forma de hacer política y hacerlo desde el FA.

 

#DeFrente: Lautaro ¿en qué consistió tu gira, qué lugares recorriste y con quiénes te reunías?

LG- El Partido Igualdad me hizo un encargo: hacer un nuevo tipo de vocería, atípica a las que se habían desplegado hasta ahora desde el Frente Amplio (FA). No tomar una fotografía y entregar una cuña a los medios de comunicación en respuesta a alguna declaración del duopolio, sino que implementar un modelo de acción en terreno donde la vocería se involucra en la movilización y genera la organización y la coordinación del FA en función de las soluciones. Esta vocería contribuyó directamente en agrupar al FA con las demandas y actores más emblemáticos del territorio. Estructuramos un plan de lucha en el marco de la campaña presidencial, de las parlamentarias y de los consejeros regionales, en la perspectiva de superar el proceso eleccionario fortaleciendo al FA como un movimiento social y político que lucha por las demandas más sentidas de la población. Por lo tanto, el encargo se implemento a través del vínculo directo con organizaciones de base cercanas al FA y otras que se agruparon a escuchar cuál es la propuesta. Se encontraron con que nosotros organizamos un plan de acción, una hoja de movilizaciones para los 140 días que quedan para las elecciones y el levantamiento de un diagnóstico situacional, que además de tomar en cuenta las condiciones objetivas y subjetivas, toma en cuenta la situación específica de las familias golpeadas por la pobreza, por la desigualdad, por la falta de agua, de urbanización, de transporte, el problema de la contaminación. Esas demandas nosotros las elevamos a un informe situacional o una hoja de lucha territorial para que la compañera Beatriz Sánchez y el conjunto del FA, profundicen en esas demandas y se involucren en la lucha que se necesita desplegar para conquistar esas soluciones. Para eso estuvimos en Arica, Iquique, Alto Hospicio, Calama, Copiapó, Concepción, Chillan, Tomé, Parral, Retiro, Curicó, La Serena, Coquimbo, San Antonio, Valparaíso y Santiago.

#DeFrente: Me da la sensación Lautaro que eres el primer vocero que está realizando este tipo de trabajo, de reunirte en terreno con distintas organizaciones de base y tomar el pulso de los sectores más populares en relación al FA ¿Cómo ves en general las organizaciones? ¿Cómo ven al FA, cómo fue tu recepción como parte del conglomerado?

LG– La tarea de la vocería es: sí no hay articulación, crearla. La apuesta del Partido Igualdad es la construcción de una columna revolucionaria dentro del FA, como una alternativa a la configuración de bloques o polos opuestos con disputas intestinas en el seno de nuestro movimiento y con el objetivo de articular y vertebrar a una criatura política en gestación que requiere desarrollar sus extremidades, su masa encefálica, su organización interna. Particularmente a eso nosotros le llamamos columna revolucionaria.  Este esfuerzo de Igualdad se expresó en articular y cohesionar a fuerzas que, hasta el momento de la gira, estaban escindidas por el proceso primario. Es una primera respuesta, un primer elemento verificador del éxito de la gira fue de que en cada una de las regiones y comunas el FA se cohesionaba, se unía y articulaba un plan de lucha que lo proyecta políticamente en el territorio como una fuerza que está movilizada, entrando en pugna con el poder y estableciendo un modelo de hacer política donde Igualdad asume un rol rector. Los partidos y los movimientos sociales y de base aprendemos y enseñamos, es decir, ejercemos una conducción colectiva a través de un ejercicio pedagógico popular. Esa fue la propuesta: sin hacer de mediadores, creamos un modelo pedagógico y político de formación y organización popular.

#DeFrente: Y en miras a un trabajo a mediano y largo plazo ¿qué estrategias crees que podemos emplear como FA para convocar a más organizaciones territoriales y de base en esta construcción de la política del FA?

LG- El debate de las ideas tiene que desatarse al interior del FA, con el objetivo de que todas las flores florezcan. Creemos que las diferencias y los elementos en común se tienen que construir en casa, es decir, muchas voces hacia dentro pero una sola hacia fuera. Entre compañeros y compañeras podemos debatir nuestra política, incluso podemos derrotar la política del compañero, pero no podemos derrotar al compañero. Nosotros fuimos estableciendo un modelo para que el FA no replique las formas desgastadas de hacer política implementadas por la Nueva Mayoría, por el duopolio. Nosotros buscamos lo nuevo y nos dimos cuenta que lo nuevo está en nosotros, por lo tanto esperamos que el modelo de vocerías en terreno, de articuladores sociales y políticos en cada población, en cada asamblea, en cada universidad o escuela se asuma como una posta que tome la nueva vocería y creemos que desde el comando presidencial también se puede liderar este proceso. Creemos que Beatriz Sánchez tiene el liderazgo para articular esta columna de luchadores y luchadoras populares que se vuelquen a todos los territorios a entregar una buena noticia: que estamos luchando, que estamos organizándonos, que estamos juntando las fuerzas necesarias para ganar las elecciones de Noviembre.

#DeFrente: En las recientes primarias se evidenció que nuestra masa votante es fundamentalmente de clase media ¿a qué crees que se deba eso?

LG– Mira yo creo que el clivaje del FA no es entre izquierda y derecha, la sociedad se divide entre ricos y pobres, entre poseedores y desposeídos, entre expulsados y expulsadores. Nosotros creemos que el clivaje del FA está situado entre arriba y debajo de la sociedad chilena, esta sociedad de dos pisos donde arriba están las siete familias y abajo está el resto del país. Nuestro pueblo pobre descalzo no vota, no porque no quiera votar por el FA, si no porque no sabe votar, nunca ha votado, cree que se puede equivocar. Es igual que aprender a andar en bici de adulto ¿por qué lo harías si te puedes caer y nunca lo has necesitado? ¿Por qué votar si te puedes equivocar? Esa franja de bajo pueblo tiene que ser invitada a votar como una forma de lucha, que el voto sea una expresión de lucha y las elecciones una forma de acción revolucionaria.

Entrevista Lautaro Guanca 1

#DeFrente: Creo que con esta hoja de lucha territorial, con esta gira que tú has hecho, puede tener sentido haber interpelado a ese sector que no se siente con esa capacidad soberana de poder sumar o formar parte de un todo dentro de lo que son nuestros procesos para construir política en Chile. Me da la sensación de que están tan acostumbrados a no sumar, a no ser parte, que no se sienten convocados a tomar sus propias decisiones.

LG- Justamente, a menos que este sea el gobierno del pan, el gobierno de la casa, el gobierno del agua, el gobierno del trabajo. Si para la inmensa mayoría del país que no vota, el FA da respuesta a sus demandas más agudas, no desde el acto eleccionario solamente sino que desde la movilización social, nosotros vamos a contar con ese voto popular. No solamente con los descontentos de la derecha o la concertación, sino que vamos construyendo un movimiento social y político que logre superar las elecciones y entrar en un periodo muy agudo, donde no van a haber procesos eleccionarios en tres años por lo menos. Todo lo que juntemos en fuerza propia a Diciembre va a ser lo que tengamos para enfrentar ese periodo unidos y a través de un proceso de movilización ascendente hasta conquistar no solamente una transformación de la correlación de fuerzas al interior del gobierno, sino que un cambio fundamental de la estructura del Estado. Hablamos de una institucionalidad social revolucionaria en función del buen vivir y eso no solamente se gana con un proceso eleccionario, sino que es un cambio en la cultura, en la economía y principalmente en la defensa y proyección de las formas de producción de vida. El capitalismo entró en pugna con las formas de vida y los territorios se han vuelto geopolíticamente decisivos. Durante 27 años de gobierno del régimen duopólico, los territorios se han construido sobre unas placas tectónicas que se han desplazado. Por ejemplo, se han expresado a través de conflictos como los de Freirina, Magallanes, Aysén, Peñalolén. Ésa es la tarea del movimiento político, es decir, dar un sur necesario, un horizonte de construcción revolucionario, una forma nueva de hacer política donde el territorio se vuelve soberano, adquiere autonomía y asume un paso político que le permite autogobernarse.

#DeFrente: Y ante el próximo encuentro de territorios del FA ¿cómo se podrían fortalecer los movimientos sociales, la orgánica y su relación con sus propios territorios?

LG Lo primero consolidar a la comuna o el comunal como la columna vertebral del FA, es decir, que el modelo de acción política del FA sea una articulación social territorial, que genere una política desde los movimientos sociales, desde las comunidades, desde los actores que están en lucha. Si el FA responde a esas demandas, nosotros deberíamos llegar a un encuentro de comunales donde definamos un modelo de crecimiento. Hay que crecer y no engordar. Además, hay que articular un modelo de trabajo posterior a las elecciones de noviembre y diciembre, en un escenario de gobierno y también en uno de lucha callejera, de articulación poblacional, donde nos vinculemos entre las distintas fuerzas políticas e implementemos formas de organización social y política desde los territorios. En vez de movernos de forma dispersa, podemos resolver en este encuentro de comunales, por ejemplo, levantar el FA en todas las comunas donde hasta ahora no hay una estructura de base. Llevar al encuentro de comunales un modelo de generación de acuerdos y decisiones desde abajo, para resolver entre la militancia de FA decisiones estratégicas. Por ejemplo, nuestro trabajo frente a la segunda vuelta -sin pensar en no pasar a ella- pero en cualquier caso nosotros llevar al encuentro de comunas la convicción de que ni en primera ni en segunda vuelta votaremos por el duopolio. De pasar a segunda vuelta y en cualquier escenario, vamos a tener diputados y diputadas, consejeros y consejeras regionales que no se pueden someter a un gobierno del duopolio. En cualquier caso debemos mantener la frente en alto y de que nada con la derecha ni con la concertación y menos con sus aliados estratégicos o tácticos.

#DeFrente: En el caso de que no ganemos, ¿Cómo nos proyectamos o imaginamos nuestra labor como FA en el próximo periodo presidencial?

LG- Lo que planteábamos en la gira es que el FA llegó para quedarse y no lo para nadie. Por lo tanto, es decisiva la forma en que enfrentemos no solamente la primaria pasada, que nos dio un piso y no un techo. Lo que nosotros proponemos es que lo electoral se vuelque no adelante ni atrás de los movimientos sociales, sino que se coloque al lado. Nos imaginamos a la compañera Beatriz Sánchez desplegando un recorrido territorial, sumándose y liderando colectivamente las movilizaciones populares. Con esto nosotros ya estamos diseñando una nueva forma de hacer política.

A la hoja de ruta de Beatriz proponemos o incorporamos una hoja de lucha territorial, que nos permita saber quiénes somos en el territorio, qué problemas tenemos, qué necesitamos del FA y de Beatriz como nuestra candidata presidencial, qué movilizaciones realizaremos, cuándo nos manifestaremos y cuál es nuestra ayuda mutua con el proceso revolucionario. Y si eso implica una acción directa o participar en la gran movilización del 19 de noviembre, en el gran combate.

Esto lo estamos proponiendo para el despliegue de la campaña del FA en general, es decir, que llamamos a todas las comunidades en conflicto, a las asambleas rebeldes, a los territorios en resistencia a elevar su planificación social y territorial. Estamos hablando de planificar socialmente el hábitat, la educación, la salud, la producción. En definitiva, el buen vivir en una clave política que nos permita unirnos en función de conquistar esas demandas sentidas por la población. Por lo tanto, para atender fielmente el sentir popular estamos poniendo en marcha esta forma de hacer política, desde abajo, y convocamos a que todas esas comunidades puedan elaborar este registro de comunicación social presidencial para unir todas las luchas en el FA. Nosotros creemos que la gira nacional fue un proceso que nos permitió proyectar el éxito de este modelo de acción, de esta propuesta de trabajo, por lo tanto pensamos que van a ser más las comunas que levanten su plan y su hoja de lucha territorial.

#DeFrente: Verdaderamente es otra manera de hacer política, que nos desmarca de lo que estamos acostumbrados hasta ahora, si esto es la base y sigue para adelante yo creo que se va a notar la diferencia.

LG– Es un método que trata de traducir en práctica política una filosofía feminista y comunitaria del quehacer político. Es decir, que ninguna voz -aunque sea la más sencilla- se quede debajo de la mesa y que todas puedan ser escuchadas. Nosotros creemos que las elecciones se ganan con votos, pero las revoluciones se sostienen con lucha.

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