
«La erudición como exigencia fundamental para ser Convencional Constituyente» por Manuel Acuña
Por Manuel Acuña Asenjo en colaboración con Felipe Tamayo Flores.
Por la boca muere el pez; y el ruiseñor, por la tarde (Refrán popular).
Nos recordaba, hace algunos días, nuestro buen amigo Heraldo de Pujadas —a propósito de la costumbre cristiana de no comer carnes rojas durante la Semana Santa—, esa sentencia según la cual más peca la boca por lo que de ella sale que por lo que, en la misma, entra. Y es que rara vez advertimos la sabia lección que nos brinda la naturaleza al regalarnos dos ojos y dos oídos, pero solamente una boca.
Unas expresiones desafortunadas.
Las palabras precedentes se nos vienen a la memoria a propósito de las desafortunadas reflexiones que formuló acerca de la Convención Constitucional (CC), la Sra. María Soledad Font, madre del presidente Gabriel Boric a la Revista ‘Ya’, de propiedad de ‘El Mercurio’, el día Martes 12 de abril (1).
De acuerdo a lo informado por la prensa, la Sra. María Soledad Font habría expresado sobre la corporación, entre otras cosas, que
“Me di cuenta inicialmente que toda la gente estaba preparada, que toda la gente que estaba ahí sabía el tema, pero después me di cuenta de que no y eso hizo que me alejara, que me asustara al darme cuenta de que contrataban a asesores porque no sabían de qué iba a tratar”
“Me preocupé cuando me di cuenta de que no todos eran eruditos. (Hay) mucha gente buena que quiere hacer cosas buenas, ¡pero para hacer eso hay que saber!”
“Cuando empecé a ver que faltaba plata, que faltaba…, yo decía ¡pero cómo!, porque pensé que las personas que estaban integrando esto eran personas con conocimiento y tenían todos los talentos para poder realizar esta cosa tan importante, por la cual, al menos yo vi, que Gabriel se inmoló para que esto resultase. Y darme cuenta de que personas que no… porque fueron elegidas no sé en qué nominación, pero no todas tenían los requisitos”, afirmó.
“Pensé que todas las personas que estaban en la papeleta eran personas con las capacidades para hacer ese megatrabajo” (2)
.
Las palabras de la Sra. Font nos parecen tremendamente desafortunadas, pues no porque sea progenitora del Pdte. de la República tiene la libertad de expresarse de ese modo de una institución que cuenta con la confianza de la comunidad nacional y la de su hijo. Expresiones como las vertidas pueden perjudicar el futuro del gobierno, íntimamente relacionado con el trabajo de la CC. Y socavar fuertemente la labor que intenta realizar el propio presidente, pues facilitan el trabajo demoledor de los poderes fácticos de este país en contra de la CC y su trabajo. Sobre el particular, basta solamente citar lo informado por la “Fundación Interpreta” sobre el ‘copamiento’ de las redes digitales, especialmente Twitter, con ataques al Gobierno que Gabriel Boric encabeza (3).
No es extraña esa actitud, los padres del presidente no tienen la misma ideología de su hijo y son, más bien, críticos, confesión que hizo a los medios de prensa Simón Boric, hermano del primer mandatario, en una entrevista que le hiciera ChileVisión el 20 de diciembre de 2021, cuando refiriéndose a las elecciones primarias de ese año, señaló que su padre (Luis) votó por Yasna Provoste:
“Mi padre es militante de la Democracia Cristiana, de hecho votó por la candidata Yasna Provoste en las primarias (consulta ciudadana). Creo que no puedo decir el voto, pero bueno (…) Disculpa papá si me fui de carriles”,
“Esas son las reglas y, en ese momento votó por la candidata de su partido. Después me imagino que apoyó a su hijo. Eso habría que preguntárselo a él” (4).
Sólo las personas preparadas pueden dirigir la sociedad.
La creencia según la cual el trabajo de la CC debe ser efectuado solamente por eruditos no es un pensamiento aislado, o privativo de la Sra. María Soledad, sino una convicción que, no siendo la predominante en el país, cuenta con fanáticos partidarios, personas que están convencidas de la necesidad de contar con convencionales constituyentes dotados de conocimientos excepcionales.
Esta suerte de ‘elitismo’ ha gobernado Chile desde los inicios de la era post dictatorial y alcanzó su clímax con la creación de la Alta Dirección Pública ADP1, que impide a una persona común y corriente acceder al desempeño de algún alto cargo estatal sin contar con determinados estudios, dada ‘la alta complejidad del trabajo’.
En Chile, históricamente, la diferenciación social se institucionalizó con la implantación del llamado ‘voto censitario’, idea que la doctora María Luisa Cordero ha llevado al paroxismo:
«El voto censitario está desprestigiado porque se usó para cosas negativas, pero la esencia ética del voto censitario es que los votos son diferenciados. El voto de una persona como yo, que tiene una profesión universitaria, que ha trabajado en hospitales públicos con los pobres, no vale lo mismo que el voto de mi Bertita, que es mi asesora del hogar» (5).
Las enseñanzas de Erich Fromm.
Erich Fromm, que se preocupara del rol de los intelectuales en la evolución de la sociedad humana, distingue entre inteligencia y racionalidad señalando, al respecto que,
“Por inteligencia entiendo la habilidad para manipular conceptos con objeto de conseguir algún fin práctico. Usa de inteligencia el chimpancé que une dos palos para alcanzar el plátano, porque ninguno de los dos basta por sí solo para alcanzarlo” (6).
“Inteligencia, en este sentido, es tomar las cosas como son, haciendo combinaciones que tienen por finalidad su manipulación; la inteligencia es el pensamiento al servicio de la supervivencia biológica” (7).
Por el contrario, para el psicólogo alemán, la racionalidad
“[…] quiere comprender, se esfuerza en descubrir lo que está detrás de la superficie, en reconocer el núcleo, la esencia de la realidad que nos rodea” (8).
Por eso, agrega:
“La razón es el instrumento del hombre para llegar a la verdad; la inteligencia es el instrumento del hombre para manipular el mundo con mejor éxito; la primera es esencialmente humana, la segunda pertenece a la parte animal del hombre” (9).
Por eso, escribimos, al respecto, en cierta oportunidad:
“Un invento, un descubrimiento, una innovación, un simple artilugio es siempre producto de la inteligencia. Cálculos exactos, dimensiones precisas, selección acabada de material, soluciones rápidas, constituyen las más de las veces manifestaciones de inteligencia, pero no siempre de razón. Una bomba atómica es el más elaborado producto de la especialidad en el exterminio de los seres humanos. Construida por físicos, químicos, ingenieros de alto nivel académico, personajes cuya capacidad nadie osaría poner en duda, es resultado de la inteligencia, pero no de la racionalidad. Lo mismo sucede con los misiles. Y con el mecanismo de las máquinas tragamonedas, destinado a quitar su dinero al jugador incauto. Producto de la inteligencia es el cálculo que establece el punto máximo de ganancia en los llamados juegos de ‘azar’ (loterías y otros), el que fija las tarifas diferenciadas para el uso de los vehículos de transporte urbano, el que concede pensiones decrecientes a medida que avanza la edad o el que priva de atención médica a los enfermos terminales por no resultar económico su tratamiento” (10).
En junio del año 2003 fue promulgada la ley N°19.882 del Nuevo Trato Laboral para la Administración Pública, que creó el Sistema de Alta Dirección Pública (SADP) y la Dirección Nacional del Servicio Civil (DNSC). Ello tras un acuerdo político-legislativo entre gobierno y oposición con el objetivo de aportar a la “modernización y transparencia” de la gestión pública. Dicho acuerdo fue protagonizado por el hoy procesado Pablo Longueira, Ricardo Lagos y Edgardo Boeninger.
Esta distinción nos permite entender que la inteligencia ha permitido que las fuerzas productivas se desarrollen a niveles insospechados, pero ha entregado también inventos abominables como lo son las armas nucleares. Porque entre el sujeto inteligente y el sujeto racional existe la misma diferencia que puede advertirse entre el caballo (que es un ‘fenotipo’, es decir un organismo cuyas extremidades se especializaron para hacerlo insuperable en la carrera) y el ser humano (que es un ‘eurotipo’, un organismo cuyas extremidades superiores pueden realizar toda clase de trabajos y, por ello, es ‘universal’).
De lo cual podemos concluir que no parece aconsejable entregar la dirección de una sociedad a sujetos inteligentes sino a sujetos racionales, que puedan mirar al conjunto social como realmente lo es y, por lo mismo, busquen soluciones globales (u ‘holísticas’) a los fenómenos que deben enfrentar.
Una Analogía Ramplona.
No debe sorprender que, en ese sentido, tan característico de los sectores dominantes de la sociedad, comentando las expresiones de la Sra. Font —y llamando la atención sobre la interrogante formulada por el rector de la Universidad Diego Portales Carlos Peña, acerca de si acaso sería importante que los convencionales constituyentes fuesen o no eruditos—, el columnista de La Tercera Sebastián Edwards concluya aseverando que sí, que es importante, y recurra, para ello, a una ramplona analogía:
“En un paralelo futbolero, lo que hemos visto hasta ahora en la CC es un equipo que juega mal, que se enreda, que es mañoso, que se contradice, y que ha metido dos o tres autogoles. Puede ser que el partido no haya terminado, pero es legítimo opinar que el equipo va mal, y que con un altísimo grado de probabilidad va a perder el partido. Y, desde luego, es válido opinar que sería bueno empezar a pensar en un cambio de entrenador y seleccionados. Estos comentarios son legítimos, aun cuando antes del partido, el 78% de los consultados hayan apoyado al director técnico y a la oncena titular.
Los “no eruditos” de la CC también están siendo irresponsable. Están lanzando a Chile por un camino desconocido y peligroso, sin informarle cabalmente a la población los antecedentes de lo que están haciendo” (11).
Nadie pone en duda el derecho que cada persona tiene para opinar. Para ello no se requieren conocimientos especiales ni esperar que un proceso esté concluido; en la sabiduría popular se dice que no se requiere ser agricultor para opinar sobre el gusto de las papas. Pero jamás debe representársele a una persona, como altaneramente lo hizo el ex ministro Briones con el ex timonel de RN Mario Desbordes, sobre su incompetencia, diciéndole ‘zapatero a tus zapatos’, e impedirle, de esa manera, opinar sobre economía. Toda altanería es inaceptable. Como la que niega para los demás y exige para sí Sebastián Edwards.
La erudición en la Convención Constitucional
Los estamentos que integran la CC, en su inmensa mayoría, son altamente calificados. En el programa ‘Pauta Libre’, del canal televisivo La Red, domingo 17 de abril, los panelistas hicieron una comparación sobre la capacidad de los parlamentarios y los integrantes de la CC concluyendo que esta última posee un porcentaje inmensamente mayor de personas capacitadas que las que existen el Congreso actual.
Por lo demás, los integrantes de la CC no tienen por qué ser ‘eruditos’. Por el contrario: como ya se ha dicho, han de reflejar una realidad social que existe, que se ha querido ocultar durante siglos y que necesita manifestarse como tal, como verdaderamente lo es. Por ende, no como un sector privilegiado que se ilustra, que adquiere conocimientos para no compartirlos y ofrecerlos como dádiva a la comunidad, sino para colocarse por encima de los demás y dominarlos.
Por eso, la diversidad que existe al interior de la CC, su composición social—que no es sino la reproducción de la estructura de clases de la sociedad chilena—, es lo que tiene de grandioso esa corporación. Ahí reside su realismo. Ahí reside su legitimidad.
La subordinación como eje de la sociedad actual.
La dominación a través del intelecto conduce ineluctablemente a la subordinación de unos estamentos por otros. Por eso, es inaceptable, porque dentro de la sociedad humana, nadie posee más derechos que otro; nadie está por encima de los demás. La subordinación de unos a otros es la más abyecta invención de la inteligencia humana, no de su racionalidad. Por ello, no existe drama más desolador que las expresiones vertidas por aquella pobre mujer quien, golpeada, en cierta oportunidad, por su marido, al momento de ofrecérsele ayuda jurídica para enjuiciar a su agresor, rogó a su interlocutor, por entero dominada:
“No… Hay que respetarlo. es ‘mío’: tiene derecho a pegarme”.
Por lo mismo, nada ha de considerarse más abyecto que ese ‘orden’ del cual habla una campesina francesa, luego de la derrota de Napoleón en Waterloo, y cuyas palabras dejaron estampadas para la historia Émile Erckmann y Alexandre Chatrian:
“Ahora todo está en orden: el señor va a administrar su castillo, el campesino a labrar la tierra y el buen cura a sus oraciones”.
La marcha de la humanidad.
La humanidad marcha, al parecer, en un sentido opuesto al que han querido mantener las fuerzas conservadoras en su camino por la historia, y que pretenden seguir reproduciendo. En sociedades más adelantadas que la nuestra, el desarrollo de las fuerzas productivas sorprende al permitir que ciertos oficios o profesiones, despreciadas en esta formación social, sean, en aquellas, altamente evaluadas, reservándose a quienes las desempeñan, remuneraciones muy superiores a otras, y que exceden con creces aquellas establecidas para los empleados de cuello y corbata.
Los recolectores de basura que, en Chile, reciben el despectivo nombre de ‘jotes’, en algunos países del hemisferio norte son altamente apreciados y su trabajo está reservado solamente para los nacionales sin que puedan hacerlo los extranjeros. Y es que las remuneraciones establecidas para ese oficio son tremendamente altas pues a quienes las practican se les exigen conocimientos especiales que dicen relación con la selección de la basura y el tratamiento de la misma. Lecciones que debemos empezar a aprender para no despreciar a quienes suponemos inferiores a nosotros.
Las críticas a la falta de ‘erudición’ de los convencionales constituyentes bien pueden ayudarnos a perfeccionarnos en esa nueva forma de relación social.
Manuel Acuña Asenjo en colaboración con Felipa Tamayo Flores, ambos miembros del Comité de Defensa de DDHH y Sindicales, fundado por Clotario Blest en 1970.
Jorge Moraga
El texto dice claramente la decdencia de los ideologoos e intelectuales burgueses chilenos y que son escaladores profesionales de la politiqueria.Que lamentable surgan individuos quew son pequwenos burguese y que su trabajo liders estudiantiles artic culados y bien alientados desde nacimiento sin grandes problemas y ser adelantado en instrucciones que la utilizn para su bienestra propio aparentando que s estan haciendo un favor a la humanidad No soracionals y muy falto de experiencia laboral La familia configura su preparacion y como se rlacionar con instruido acomodados no saben del sufrimiento de los trabajadores.Pero el mundo esta despertando y las promesas electorales se tiene que cumplir pues de otra manera mejor que renuncien si no tiene vouluntad politica para tranformar el modelo de dominacion imperante.Se ha engañado por mas e 3 decadas y no salud que aguante Se requiere honestidad ,respeto y humilda para la mayoria de los ciudadanos
Guille
a) Las masas durante oct-dic 2019 no demandaron nueva constitución ni AC, sino que: i) Fin a las AFP; ii) fin a los 30 anhos (nadie pedía volver a la dictadura, por lo que lo que se pedía era volver a los tiempos de la UP, donde se jugaron alternativas para superar destruir la sociedad burguesa). Como ejemplo pongo este comentario de radioprimerodemayo, que no es de mi tienda ni me representa, pero que en ese momento sí expresó con lucidez la reivindicaciones clasistas de las masas:
“No permitamos que los y las oportunistas se adjudiquen nada.
No les compremos sus cuentos de asambleas constituyentes para dialogar.
Cuidado que andan lob@s disfrazados de ovejas ofreciendo reuniones, luego serán candidat@s al mismo sistema que nos oprime desde las poblaciones al mismo gobierno…
No es solo el METRO
Es la Salud
Es la Educación
Es el sueldo mínimo
Son las Pensiones
Son los sueldos de los Parlamentarios
Es el Aumento de la cuenta de la Luz y el Agua
Es el Aumento de la Bencina
Es el Tag
Son los Robos en las FFAA
Son los miles de despidos de las empresas transnacionales
Son las Condenas “Ejemplares” a empresarios coludidos
Hoy es el momento de cambiar!”
(radioprimerodemayo, 26 oct 2019)
b) El acuerdo del 15 de noviembre supone ambas alternativas (apruebo o rechazo), y rechazarlo supone rechazar ambas. Si no, se legitima y acepta el noviembrismo (que se opone por el vértice al octibrismo). Notar, también, que esta alternativa fue la escogida por las masas mayoritaria y democráticamente. El acuerdo y ambas alternativas nunca tuvieron ni tienen mayoría democrática. Quienes afirman lo contrario o no saben de lo que están hablando o enganhan intencionadamente. Aquí dos informaciones decisvas:
b.1) Participación electoral:
Plebiscito Convención Constituyente oct 2020 (49%)
Elecciones a la Convención Constituyente mayo 2021 (39%)
b.2) Alto grado de sectores de derecha política que votaron apruebo en oct 2020 en barrios de clase dominante:
Comunas de clase alta en RM y votación 2017-2020 comparadas:
[Compararción con la 1era vuelta presidencial]
I. Las Condes
Plebiscito 2020
Rechazo = 55,75% (92.423)
Participación = 62,15% (166.475)
Elecciones 2017
65,4% (Pinhera) 100.375
8,5% (Kast) 13.032
7,8% (Carolina Goic) 11.902
Participación = 62% (155.696)
Pinhera y Kast = 73,2% (100.407)
Pinhera, Kast y Goic = 81,7% (125.309)
Siendo que la participación es la misma en 2017 y 2020:
a) La derecha de clase alta no se abstuvo
b) Existe un 17,5% que votó Pinhera o Kast que votó Apruebo
c) Existe un 26,95% que votó Pinhera, Kast o Goic que votó Apruebo
[No son votos populares de derecha, sino votos de clase alta y media alta]
II. Lo Barnechea
Plebiscito 2020
Rechazo = 61,63% (33.902)
Participación = 67,92% (55.257)
Elecciones 2017
72,4% (Pinhera) 33.343
7,9% (Kast) 3.649
7,8% (Carolina Goic) 2.031
Participación = 62,9% (46.621)
Pinhera y Kast = 80,3% (36.992)
Pinhera, Kast y Goic = 88,1% (39.023)
Siendo que la participación en 2017 es menor que en 2020:
a) La derecha de clase alta no se abstuvo
b) Existe un 18,4% que votó Pinhera o Kast que votó Apruebo
c) Existe un 26,5% que votó Pinhera, Kast o Goic que votó Apruebo
[No son votos populares de derecha, sino votos de clase alta]
III. Vitacura
Plebiscito 2020
Rechazo = 66,95% (40.219)
Participación = 67,98% (60.325)
Elecciones 2017
74,1% (Pinhera) 42.997
7% (Kast) 4.067
7,6% (Carolina Goic) 4.407
Participación = 69,1% (58.750)
Pinhera y Kast = 79,1% (47.064)
Pinhera, Kast y Goic = 86,5% (51.471)
Siendo que la participación en 2017 es más o menos la misma que en 2020:
a) La derecha de clase alta no se abstuvo
b) Existe un 12,15% que votó Pinhera o Kast que votó Apruebo
c) Existe un 19,45% que votó Pinhera, Kast o Goic que votó Apruebo
[No son votos populares de derecha, sino votos de clase alta]