
Gobierno de España toma partido por el Reino de Marruecos desconociendo demandas del Sahara Occidental y programa del PSOE
En una controvertida decisión que desconoce las demandas históricas del pueblo del Sahara Occidental y el propio programa del PSOE, el gobierno encabezado por Pedro Sánchez (en la foto de portada, junto al Rey de Marruecos Mohamed VI), ha tomado partido a favor del Reino de Marruecos, apoyando la propuesta de autonomía marroquí como la “más seria, realista y creíble” para resolver el conflicto, dándole un estatuto de «autonomía» dentro del marco del Estado monárquico de Marruecos.
El programa del «Partido Socialista Obrero Español», PSOE, dice expresamente sobre este punto: «Promoveremos la solución del conflicto de Sáhara Occidental a través del cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas, que garantizan el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui»:
El tema está siendo objeto de numerosas interpelaciones públicas desde el Pueblo Saharaui y desde la misma España, donde las organizaciones y militancias de izquierdas apoyan hace años una solución favorable a las demandas saharauis, en un conflicto que tiene como contraparte a la poderosa e influyente monarquía marroquí.
Respetar la legalidad internacional es un deber inexcusable. También con el Sáhara Occidental. Más cuando tu programa lo indica. Esto dice el programa del PSOE: “Promoveremos la solución del conflicto de Sáhara Occidental a través del cumplimiento de las resoluciones ONU".👇🏾 pic.twitter.com/NPIDloCyrT
— Antón Gómez-Reino🔻 (@AntonGomezReino) March 18, 2022
Para más informaciones, ver lista de cuentas de twitter de organizaciones y movimientos del Pueblo Saharaui.
Y aquí, un texto publicado por el saharui Ali Mohamed en la web «No te olvides del Sahara Occidental»:
Ceder al chantaje marroquí es una clara muestra de la débil diplomacia de Madrid en la escena internacional.
ECS. Madrid. | Mientras anunció que junto a EE.UU “coordinarán esfuerzos para solucionar el conflicto saharaui” y apoya las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que prevén el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui, apoyando también sus esfuerzos en descolonizar el Sáhara Occidental, interpone obstáculos objetivos para siquiera unos cimientos de un proceso de paz; pues recurrió la sentencia que anuló los acuerdos de asociación UE-Marruecos por incluir el Sáhara Occidental y ahora anuncia su apoyo a la autonomía marroquí para un territorio no autónomo ocupado por Marruecos desde 1975.
Mientras pide el respeto al derecho internacional en Ucrania y condena enérgicamente a Rusia, Madrid pisotea a los que algún día fueron nacionales con escaños en el Congreso y arrolla con los principios del derecho internacional al apoyar la solución que propone la fuerza ocupante para el territorio que ocupa. Es decir, España apoya, encubre y asiste a un autor de un crimen internacional como es el Reino de Marruecos, al impedir la libre expresión de un pueblo sometido a dominación colonial e inscrito en la Agenda de Descolonización de la ONU desde 1963.
Una decisión enmarcada en su mala interpretación de la política de vecindad con Marruecos, que sin embargo no aplica con su vecino argelino. Guiado por el chantaje migratorio alauí y la guerra híbrida de Rabat por Ceuta y Melilla, Moncloa sucumbió y reflejó visiblemente su pobre capacidad diplomática en la escena internacional, ya reflejada en su gestión actual de la crisis de Ucrania. Una decisión que lejos de solucionar problemas, los multiplica; tensa el Norte de África, se enemista con Argelia y enardece aún más a los saharauis en guerra. Una guerra en continúa fase incremental que por sus implicaciones genera imperativos de seguridad a los países que comparten la cuenca del Mediterráneo y el Atlántico.
El estado español confunde intereses con deberes como potencia administradora de un territorio, y pretende eludir su responsabilidad olvidando las carta que enviaron a la ONU en 1975 exigiendo disuadir a Marruecos para que detenga su invasión del Sáhara Occidental y matizando que el Sáhara Occidental no quedará completamente descolonizado hasta que no se pronuncien sus habitantes.
Fuente: No te olvides de Sahara Occidental.