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«Cuatro millones de nuevos votantes, presente» por Miguel Silva

Por: Miguel Silva

Hace poco, en una reunión de la revista, me explicaron cómo se organizó la campaña por el Rechazo. Fue algo así… que los analistas de comunicaciones y políticos del Rechazo investigaron quiénes eran los millones de personas que iban a votar por primera vez. Eso, por un lado y por el otro, decidieron cuáles serían los pilares de su campaña de propaganda. Decidieron concentrar su campaña en dos temas… primero contra los “políticos”, es decir contra los y las convencionales, Bóric y su gobierno. En otras palabras, “son los políticos de siempre”. Y el segundo pilar fue instalar la idea que esos políticos quieren robarnos lo poco que tenemos… la casa. “Nos quieren robar lo que tenemos”. 

Implementaron esta campaña en las franjas, pero más importante en las radios nacionales y locales y en las RRSS donde se disparaban noticias y rumores falsos que “probaban” que las dos columnas de su campaña eran, de verdad, la verdad. 

Ahora bien, fue una campaña muy bien organizada, con muchos recursos, pero ese hecho no explica su éxito… ¿Por qué lograron convencer a cuatro millones de nuevos votantes que su campaña era la pura verdad? 

Y la respuesta creo, es que estos cuatro millones no tenían instalado en sus conciencias un recuerdo de lo solidario de la revuelta de octubre, sino recuerdan la cobertura de la tele. En fin, no tienen recuerdos que podían servir como barrera capaz de repeler la campaña del Rechazo como el aceite repele al agua, por así decirlo. No tenían la protección que brinda la solidaridad. Entonces cayeron en la trampa. 

Bueno, puedes responder, los días y semanas del octubre eran momentos de frustración, días de rabia y de una nueva ideología llevaban muy poco. Algo de razón tienes, pero los grandes movimientos muy a menudo son una mezcolanza de sentimientos e ideas muy diversas, porque integran millones de personas que, por lo general, no han tomado parte en “ese tipo de cosas” antes. 

Es su primera marcha, su primera barricada, gritando en la calle con sus vecinos y vecinas por la primera vez. Son nuevos, sin experiencia de “ese tipo de cosas”, y por ende sus conciencias integran todo tipo de cosas nuevas con la ideología que ya tienen instalada en sus cabezas, y que viene de la tele, los diarios, las radios y de su experiencia misma de la vida.  Muchas y muchos tienen una conciencia llena de contradicciones. 

Sin embargo, los tres millones (según recuerdo las cifras de carabineros) que tomaron parte activa de octubre cambiaron, por lo menos por un tiempo. De hecho, los cuatro millones (más o menos) que votaron por Bóric en la segunda ronda de las elecciones presidenciales, votaron también por el Apruebo. Estaban y están convencidos. 

Pero, pero, al parecer, los cuatro millones de jóvenes populares que votaron por el Rechazo, no habían sido tocado por los días y semanas de octubre. O quizás, para decirlo de otra manera, la cara de ira y frustración que era parte importante de la revuelta, también para ellos fue una razón para seguir votando contra los “políticos”, incluso contra los cambios transmitidos por los y las convencionales, quienes también a sus ojos eran “políticos”. 

Y los y las convencionales mismos, elegidos en uno u otro sentido como delegados a la Convención, no podían retransmitir su obra a “su gente” porque las organizaciones sociales base ya no eran las masivas y activas como antes. En otras palabras, los y las convencionales quedaban colgados en el aire, por así decirlo, incapaces de cambiar las opiniones de millones de personas que esperaban, por fin, las buenas noticias que nunca llegan a sus barrios.  

Puedes decir que los y las convencionales hablaban con un sin fin de “delegados” de organizaciones sociales que llegaban al ex-Congreso. Pero esos mismos delegados transmitían el sentido de cómo eran sus organizaciones bases durante las grandes jornadas de octubre. Las asambleas locales, los cabildos y las acciones mancomunadas de octubre y noviembre ya eran un recuerdo en las conciencias esperanzadas de los dirigentes cuando llegaban a discutir con los y las convencionales. ¿No es cierto? 

Bueno, otra cosa que puedes decir es que los cuatro millones podrían haber echado la culpa por su malestar a los ricos. Faltan viviendas por culpa de las empresas inmobiliarias y la desigualdad. Mejor dicho, porque la plata que todos sabemos que hay en el país, está en manos de unos pocos. Pero los millones optaron (inconscientemente) por creer que los políticos tienen la culpa por todo eso, y que los mismos políticos son los que quieren sacar de sus manos lo poco que tienen. 

¿Por qué piensan así?… porque es la ideología del sistema echar la culpa a los pobres por su propia situación. Los pobres son pobres porque no sirven para nada más, por así decirlo. Por ende cualquier intento de hacer cambios grandes es un “crimen” que atenta contra todos, incluso contra ellos. 

Pero sí, hay un hilo de rebeldía dentro de ese rechazo, y a veces aparece a la luz del día y puede abrir las puertas para un contra-ataque. Es echar la culpa a los que realmente, de verdad, roban -día tras día- lo que tienen los cuatro millones.  

Pero ese contra-ataque no puede ser parte de una política que no habla de cambios grandes. Tiene que convencer que es algo que se va a hacer, de verdad. Podemos sacar las minas de litio de las empresas de Ponce Lerou y de la multinacional china. Pero se va a hacer de verdad.  

Una política de “de a poco”, de negociaciones, no va a convencer a los cuatro millones. Ellos y ellas van a comenzar a creer cuando comiencen a ver esos cambios. Cuando vean que el gobierno, el Serviu o el municipio han sacado una buena cantidad de hectáreas que conocen, de las manos de sus dueños y han comenzado a construir para ellos, para su gente. Ver es creer.  

Y ahí entra como tema importante las condiciones de vida de los cuatro millones. Saben, de primera mano, que el aceite, la harina, el pan y la carne suben casi todos los días. Saben que sus sueldos (si tienen pega) no alcanzan para comprar como antes. Lo que no saben es que las empresas han aumentado sus ganancias este año en 64%. 

Decirlo de otra manera, con otras palabras. Según algunos, el Rechazo, aunque organizado por la derecha, fue una demostración, una muestra, que la gente no está ni ahí (por así decirlo), con la forma en que se maneja su país. De ese hecho puedes sacar dos conclusiones. Primero, que ellos quieren manejar el país ellos mismos, o en otra manera quizás. O, por otro lado, que no sacan conclusiones “claras”, o que sacan conclusiones distintas y contradictorias. Creo que sacan conclusiones distintas y contradictorias. 

Acto seguido, los cuatro millones sienten que sus condiciones de vida están cambiando … ¿y echan la culpa a quién… a los políticos… a los ricos?… la opción que toman entre los culpables es un tema ideológico. Van a elegir.  

Pueden elegir a los puros políticos como los culpables y quizás formar parte de un nuevo movimiento popular de derecha,como el tristemente famoso capitalismo popular. O pueden elegir a los políticos y a los ricos como culpables y dar su apoyo a los impuestos a los ricos, la nacionalización al litio o la expropiación a una buena cantidad de tierra donde construir casas — para ellos.  

Es decir: “Darles duro a los ricos porque nos roban todos los días… ahora nos toca a nosotros” 

 

 

 

 

Comentarios (2)

  • Ivan

    Los ignorantes somos nosotros que creemos que sabemos todo. Es simple no se construye mayoría tejiendo una política tejida por y a las minorías y tampoco con un gobierno de transformación que gobierna con el mismo manual de treinta años y su variedad esta en las acciones comunicativa de las redes sociales que recopilan me gusta, compartir y comentarios sin que eso construya nada solido en un tiempo tan liquido…. las transformaciones que nos planteamos en octubre 2019 debían llevar un cambio en la vida de esos cuatro millones pq en ellos se expresa toda la desigualdad del sistema y su dominación cultural y económica y por tanto política

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  • Natach

    Muy válido el comentario pero pienso que es cansados andar cuidando al pueblo que ya hizo su opción ,los dejo libres de actuar como lo hicieron y …..QUE SE JODAN POR IGNORANTES!!!!!

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