
Argentina: La paranoia terrorista se desata en el gobierno de Macri
Son malos días para la Ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich. La admiradora confesa de Jair Bolsonaro viene endureciendo su política de criminalización de la protesta y el control ciudadano. Pero a punta de errores garrafales.
Esa semana se conocía de la expulsión de parte del plantel de Futsal de Pakistán, el cual venía a competir en el Mundial de la categoría en la provincia de Misiones. Las razones aducidas eran de «Seguridad Nacional». Tras chequear los antecedentes, el gobierno trasandino pidió disculpas a Malik Adnan, Secretario de la Federación, pakistaní, pero ya los jóvenes iban de vuelta a su país.
Luego vino el caso de los arquitectos chilenos Felipe Zegers y Gabriela Medrano, quienes fueron acusados de portar elementos terroristas y dejarlos en el hotel donde hospedaban, en Córdoba. El aparato era un proyecto que venían a presentar al Congreso de la Lengua y consistía en una máquina que traducía textos en lenguaje inclusivo. Sin embargo, la policía hizo detonar el objeto y sólo halló en él dos parlantes.
El juez Miguel Vaca Narvaja, los dejó en libertad, pero defendió el accionar policial. “No creo que se haya tratado de un papelón (…) se trata de una valija que no es común y dentro de una coyuntura como el Congreso de la Lengua, donde hubo autoridades extranjeras y la mirada de la prensa mundial, uno maneja una hipótesis, que me parece acertada”, le expresó a la prensa.
Y esta tarde, integrantes del seleccionado colombiano de BMX fueron retenidos en el Aeropuerto de Mendoza para “verificar su pasado judicial”, ya que eran colombianos. La policía sospechaba que, de no ser terroristas, podían venir a vender sus bicicletas. Los deportistas difundieron su caso por redes sociales y se viralizó rápidamente.